El consorcio público privado integrado por la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) Facultad Regional Villa María y las empresas cordobesas Prodeman S.A. y El Zorzal S.A, avanzan con la ejecución de un proyecto de generación de energía eléctrica que utilizará biomasa de cáscara de maní como materia prima. La iniciativa recibió un subsidio de $17.203.500, en el marco de la convocatoria Fondo de Innovación Tecnológica Sectorial de Energía que administra el Fondo Argentino Sectorial de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, dependiente del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva.
El desarrollo propuesto prevé la instalación de una unidad de generación eléctrica de entre 5 y 6 MW de potencia que consiste en una caldera de vapor que utilizará como material combustible la cáscara obtenida como subproducto resultante del proceso de industrialización del maní (descascarado y selección) principal actividad económica de las empresas involucradas.
La energía que genere la planta servirá en parte para alimentar el proceso productivo de la empresa, mientras que el remanente será inyectado al Sistema Argentino de Interconexión (SADI) contribuyendo así a diversificar la matriz energética provincial y nacional.
En la actualidad, el proceso productivo genera 50.000 toneladas al año de cáscara de maní y su disposición final conlleva prácticas poco amigables con el ambiente, ya que se utilizan métodos como la quema del material a cielo abierto -lo que origina corrientes de humo que pueden resultar perjudiciales para poblaciones urbanas o para el tránsito en ruta-, o el enterramiento, que causa una variación en el PH de los suelos y puede suscitar problemas en las napas freáticas.
En este sentido, el proyecto contribuirá también a mitigar el cambio climático ya que la energía obtenida a través de la biomasa es neutra en términos de emisiones de gases de efecto invernadero toda vez que el dióxido de carbono liberado a la atmósfera durante la combustión de la cáscara de maní es menor al capturado por la planta durante su desarrollo.
Al respecto, el ingeniero Jorge Ciravegna, director del proyecto señaló que “hemos medido la huella de carbono y la emisión que tiene Prodeman en todo el proceso del maní” y agregó que “al reemplazar la utilización de energía proveniente de combustibles fósiles por la obtenida a partir de un residuo agrícola se equilibra la cuenta desde el punto de vista de las emisiones”.
Otro de los alcances del proyecto será la posibilidad de incorporar otros desechos biomásicos de las jurisdicciones cercanas, valorizando así los residuos para la generación de energía y evitando su disposición final en terrenos aprovechables para otros fines.
La unidad de generación de energía estará ubicada en un terreno de 330 hectáreas lindante con la planta de selección donde se lleva adelante la industrialización del maní. Se prevé entre en funcionamiento en marzo de 2015.