Los motivos de este aumento en la producción tienen asidero en las grandes precipitaciones estivales que desde hace un par de años y en algunas zonas de la región manisera superan claramente la media histórica. Así, y según los datos aportados por el INTA General Cabrera, los rindes superaron ampliamente los treinta quintales en vaina por hectárea con picos de hasta ochenta quintales (8.000 kg en caja).
“No hay ninguna duda de que en los tres últimos años hemos tenido precipitaciones superiores a la media histórica y se han concentrado particularmente en los meses de Febrero y Marzo. Después, los primeros fríos y también algunas lluvias de otoño aisladas generaron un poco de atraso. Sin duda que la dinámica cambió, pero hay que gambetearla y sembrarlo lo más temprano que se pueda, siempre que las condiciones estén dadas, para levantar la cosecha lo antes posible” dijo el ingeniero Darío Boretto del INTA General Cabrera.
Lo que viene
Signado por los grandes cambios climáticos, los tiempos para el maní han cambiado. De la mano de la genética, la tecnología y el manejo se busca acortar los ciclos, achicar los surcos, adelantar fechas y así aprovechar todo el potencial productivo del cultivo.
“Hay que tratar de rotar conscientemente por varios motivos, en primer lugar la conservación de los suelos pero también para no sacrificar el rendimiento potencial del cultivo. Es más que sabido que tenemos enfermedades tanto foliares como de suelo que son de difícil control como la esclerotinia y la única forma de diezmar eso es hacer rotación cortando la fuente de inóculo” apuntó Boretto.
“Treinta años no es poco”
La Jornada Nacional del Maní cumple treinta años y el INTA junto al Centro de Ingenieros Agrónomos se preparan para recibir a técnicos y productores del sector en un evento que tendrá un sabor diferente. “Treinta años ininterrumpidos de capacitación para el maní no es poco y en el marco de eso queremos que sea un jornada especial. Tenemos la confirmación de visitantes extranjeros que van a disertar sobre el mejoramiento genético, vamos a hacer paneles temáticos con especialistas y referentes dentro de cada área pero sin perder la esencia de la clásica jornada técnica. Y tendremos un cierre con un ágape para coronar estos treinta años que están cumpliendo las jornadas nacionales del maní” cerró el ingeniero Boretto.