Estos números representan un aumento del 34% en volumen y del 16% en valor respecto del mismo período de 2024, alcanzando así los valores más altos de los últimos siete años para este producto regional emblemático.
Entre los rubros que más crecieron se destacan el aceite de maní, con un salto del 71% en volumen y 55% en valor, seguido por el maní confitería, que subió 33% en volumen y 14% en valor, y las preparaciones a base de maní, con un incremento del 19% y 8%, respectivamente.
Argentina mantiene así su posición como exportador número uno del mundo y principal productor de América Latina, con presencia en más de 50 destinos internacionales.
Los principales mercados siguen siendo Países Bajos (puerta de entrada a Europa), China, Reino Unido, Chile y Polonia, aunque se destacan fuertes crecimientos en destinos no tradicionales.
China, por ejemplo, aumentó sus compras 512% en volumen y 330% en valor, alcanzando los 58 millones de dólares. Bélgica también mostró un salto notable, con subas del 484% y 392%, superando los 15 millones de dólares, mientras que Nueva Zelanda registró incrementos del 207% y 166%, con exportaciones por 8 millones de dólares.
Además, este año se retomaron exportaciones a países como Serbia, Vietnam, Egipto, Dinamarca, Ucrania y Eslovenia, donde no se registraban operaciones desde hacía varios años.
Competitividad y producción récord
El buen desempeño exportador se apoya en un marco de mayor competitividad. En enero de 2025, el Gobierno nacional eliminó las retenciones que aún quedaban sobre la cadena manisera y redujo los aranceles de importación para maquinaria e insumos, fortaleciendo la capacidad productiva e industrial del sector.
La campaña 2024/2025 también dejó un hito histórico en el campo: una producción total de 1,8 millones de toneladas y una superficie sembrada superior a 533.000 hectáreas, ambos valores récord para la cadena.