Estudian la cáscara de maní como anticancerígena

La luteolina es un colorante vegetal con antioxidantes, lo que le permite actuar como antiinflamatorio y compuesto para prevenir el cáncer, sobre todo de piel.

 

Gilberto Chui, estudiante de la carrera de Ciencias Químicas y parte del grupo de investigadores, informó que el estudio empezó hace un par de años y que fue denominado “Cuantificación de luteolina en la cáscara de maní”.

 

La luteolina es un colorante vegetal con antioxidantes, lo que le permite actuar como antiinflamatorio y compuesto para prevenir el cáncer, sobre todo de piel.

 

El Instituto de Investigaciones Químicas de la UMSA encaminó el estudio con la experiencia de haber identificado la luteolina en plantas medicinales y tras verificar que el 75% de la cáscara de maní es desechado en el proceso industrial, tanto en Sucre (Chuquisaca), Cochabamba y Tarija.

 

Para el análisis se recolectaron muestras de cáscara tostada y sin tostar de 30 variedades. Giovanna Almanza, directora de dicho instituto, señaló que los primeros resultados confirman la presencia de la luteolina, entre 0,5% y 1%,  en cuatro variedades de cáscara de maní.

Se trata de las variedades phiti cintura colorado, de Oronqota (Potosí); pico y loro, de Monteagudo (Chuquisaca); phiti cintura ladrillo, de Padilla (Chuquisaca); y largilla icha, de Overo (Chuquisaca).

Debido a que la cáscara de maní no tiene muchos compuestos es fácil de aislar la luteolina, resaltó el investigador.

 

Almanza dijo que es mejor utilizar las cáscaras tostadas porque son “bastante” estables debido a que, a pesar de estar a altas temperaturas, no presentan cambios. “Es muy bueno, incluso los principales proveedores de la cáscara son industrias que hacen maní tostado”.

 

El maní es un producto que se cultiva en los municipios chuquisaqueños de Muyupampa, Monteagudo y Padilla, además de otras regiones de los departamentos de Cochabamba, Tarija, Potosí y Santa Cruz. Bolivia ocupa el puesto 20 de 125 países exportadores de maní en el mundo, según datos del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).

 

En el equipo de investigadores de la UMSA también están Ángela San Martín y Jhonny Flores.

Almanza destacó que al tener el maní la luteolina pasa a ser preventivo contra el cáncer. “La Paz tiene alta radiación ultravioleta y ésta puede generar cáncer de piel. “Nosotros podemos hacer una crema con este tipo de compuesto (luteolina) para inhibir los efectos de la radiación ultravioleta”, detalló la directora.

 

Resaltó que a diferencia de otras pomadas, el compuesto extraído de la cáscara de maní sería natural y estaría elaborado de residuos generados en cantidad por industrias del país. Además, añadió que la luteolina es probada en investigaciones mundiales.

 

El equipo analiza ahora las propiedades de la cáscara de maní y trata de optimizar el método de extracción para luego hacer las diferentes formulaciones.

 

“En dos años se harán las pruebas experimentales, es decir, una crema”, anticipó la investigadora.

Para llegar a esta fase intervendrá el equipo de farmacéuticos, bioquímicos y médicos, que son parte del Instituto de Investigaciones Químicas de la UMSA. El objetivo es que una empresa farmacéutica se interese por el producto. 

 

Fuente: Diario La Razón (Bolivia)